De Política Alejandro Álvarez Manilla

En México, la democracia sigue en pañales. Los partidos políticos son botín de cacicazgos heredados o adjudicados que solo compiten para mantener el poder económico mediante gobiernos, posiciones legislativas que les de capacidad de ser gestores de políticas públicas, y lograr adjudicaciones de posiciones administrativas o contratos de adquisiciones importantes.    

De los siete partidos políticos con registro y por ende representación en el Congreso de la Unión tres de ellos se mantienen con sus fundadores, como si fueran franquicias como el Movimiento Ciudadano, Partido del trabajo y el Verde Ecologista.   

Marko Cortés, está al frente del Partido Acción Nacional (PAN), que aprovecho el vacío que dejo Ricardo Anaya para buscar la candidatura Presidencial en 2018, y mientras la dirigencia del partido fundado en 1939, estuvo en manos de Damián Zepeda, y Marcelo Torres por un par años.

Luego Cortés controlo los comités distritales, y logro mantener la Presidencia del PAN después de las elecciones del 2018 y en noviembre de ese año venció en el proceso de elección a Manuel Gómez Morín. EL PAN gobierna en este 2023, cinco entidades dos con alianzas del PRI y PRD.

El Partido de la Revolución Democrática (PRD) precursor de los primeros gobiernos de izquierda en México, como Zacatecas, Ciudad de México, Tlaxcala y Baja California Sur, perdió su fuerza al salir Andrés Manuel López Obrador y fundar Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA). Hoy con Jesús Zambrano que se apodero de la dirigencia con vacíos estatutarios, solo hace declaraciones que tienen impacto mediático, ya que carece de militancia. El partido no tiene ni para pagar la nómina a sus empleados del edificio de ubicado en la calle de Benjamín Franklin e la capital del país.

Por cierto, el PRD hace conferencias en la Cámara de Diputados con Jesús Zambrano y no en su edificio sede por temor a una protesta de sus empleados a que no se les paga.

El Partido Revolucionario Institucional (PRI), el partido hegemónico que gobernó el país por más de siete décadas, hoy en plena decadencia ya que solo gobierna tres entidades una de ellas en alianza y compite en junio próximo en Coahuila y Estado de México para la elección de nuevo gobierno, donde tiene el riesgo de perder uno de los estados en proceso.    

Alejandro Moreno Cárdenas, fue electo como dirigente del PRI, también en 2018, en agosto de ese año el contendiente para competir fue José Narro Robles, el ex Rector de la UNAM y ex secretario de Salud, pero en una encerrona promovida por Alfredo del Mazo que gobierna el Estado de México ahí se impuso como candidato de unidad al viejo estilo priista.

Pero por su extraño comportamiento en procesos legislativos se le apodo “AMLITO” en referencia al Presidente, sus acciones contra la Reforma Energética, donde la hizo de héroe para desecharla, misma que no pasaría porque el “T MEC” lo prohibía.

Y no solo eso, sino la propuesta de mantener a las fuerzas armadas fuera de los cuarteles hasta el 2028, a través de la diputada del PRI Yolanda de la Torre, a quien como premio la hicieron presidenta del Tribunal Superior de Justicia de su oriundo estado, Durango.

Lo que llevo a ser denunciado para que terminara su periodo de dirigencia, la cual negocio y dividió la fracción política de su partido en el Senado de la República. Y así competirá el tricolor en las elecciones de Coahuila, donde el PRI es fuerte, no así en el estado de México, además la elección federal del 2024.  

El Partido del Trabajo (PT) que fundo y aun dirige Alberto Anaya, sigue como partido muégano de aliado a lo que queda de la izquierda, porque hoy los “chairos” ya son “fifís”, ya no viajan en transporte público, ahora traen vehículos del gobierno y hasta con chofer, tampoco van a las quesadillas o las tortas y tamales, comen en restaurantes de cinco tenedores.

Es partido tuvo sus únicos logros políticos en el Municipio de Durango por seis años, que permitió a los votantes ver qué tipo de gobernantes son, y no volvió a votar por el PT por lo menos en ese municipio.    

Mario Delgado, financiero y administrador hoy es el Líder de MORENA, el partido en el poder, quien en alguna ocasión defendió a López Obrador, por hacer su “Cochinito” al poner el material estándar en las terminales del Metrobus de Insurgentes, en la capital del país, por lo cual se volvieron a rehacer por el hundimiento que se les hizo.

El dirigente de MORENA, sabe del tráfico de influencias, pero en especial de la dispersión de recursos económicos públicos, sino habrá que recordar cómo se colocó material de baja calidad en la línea 12 del Metro en la Ciudad de México, que primero provoco el cierre de varias estaciones y después hace solo 2 años, y que aún no se reinstala el servicio total de la línea.

Mario Delgado, también esta como dirigente ilegal en MORENA, ya desde el 20 de noviembre del 2020, está al frente del partido en el poder, y no convoca a Asamblea para la renovación de la Presidencia y la Secretaria General.           

El Partido Verde PVEM propiedad de Jorge Emilio González, heredada de su padre a quien se lo conoció como el “Tucán”, quien cambio su empresa de proveedora del Departamento del Distrito Federal, hoy Ciudad de México, por la franquicia política, que ni es verde y tampoco ecologista. Ahora padre e hijo este último por cuestiones de salud, están alejados de su partido político, y su representante Karen Castrejón, pocas veces de le dan permiso de hacer pronunciamientos, ni para bien o para mal.

Eso sí no abandona su postura de partido muégano de aliado al poder, en el siglo pasado estuvo con el PRI, a inicios de este siglo con el PAN, luego cambio de nuevo al PRI, y ahora con MORENA.

Finalmente, la séptima fuerza política es Movimiento Ciudadano MC, propiedad de Dante Delgado, hoy Senador, negociador y promotor de todo lo que se concierne al color naranja, gobiernos estales y municipales, y no se diga en el área legislativa. Hasta se le ha llamado “Cazando Ciudadanos”, por las constantes afiliaciones que logra de senadores y diputados.

Dante Delgado fundo el partido Convergencia Democrática, que luego cambio para tener más impacto social. Hoy gobierna los estados de Jalisco y Nuevo León, así como el Municipio de Monterrey con el hijo del malogrado candidato presidencial del Tricolor Luis Donaldo Colosio.

MC, ha hecho lo que otros partidos, piratea líder de opinión y los apoya con bastos recursos económicos, que seguramente obtiene de sus prerrogativas o sus inversiones ocultas que finalmente los hace triunfar, el ejemplo más icónico es Nuevo León.  

Por cierto, para la elección del 2024 se rumora que MC se integrará a la alianza “Va por México” para derrotar al partido en el poder.   

Aunque esta la incógnita esta, se logrará ganar, con liderazgos de partidos que son utilizados con franquicias lucrativas, y nada ven a favor de la población.