De Política, Alejandro Álvarez Manilla A solo cuatro semanas de la mayor elección de la historia del país, la violencia política va en aumento. Desde destrozo de publicidad en la vía publica, desacreditación de aspirantes, atentados y hasta asesinatos de candidatos, además hasta discrepancias entre amigos y familiares es lo que vive México en la […]
De Política, Alejandro Álvarez Manilla
A solo cuatro semanas de la mayor elección de la historia del país, la violencia política va en aumento. Desde destrozo de publicidad en la vía publica, desacreditación de aspirantes, atentados y hasta asesinatos de candidatos, además hasta discrepancias entre amigos y familiares es lo que vive México en la actualidad.
Esto sumada a la participación del Gobierno Federal en denuncias ilógicas y violando la secrecía de sus datos personales, de un hecho que ocurrió hace 20 años, y que todo gobierno en turno la practicado de los colores que sean. Estas denuncias son aprovechadas como bandera de campaña, aumenta el calor político.
La actualidad en redes sociales es difundir en pro y en contra, si los candidatos o candidatas. si se pone cachucha, o casco, y si se peina o se maquilla, si baila o se tropieza o utiliza chaleco antibalas, si monta a caballos o bien si sale en un automóvil de lujo, Todo es criticable, pero hay imprudencia de aspirantes, en repetir mentiras que difunde el gobierno sin comprobar, y acusar sin demandar. Y por supuesto utilizar vehículos de lujo en campaña que todas se dicen austeras.
Los ataques de delincuencia organizada contra candidatos y candidatas, que en ocasiones han cobrado vidas, son en su mayoría para quienes buscan una alcaldía con ser concejales, diputados locales o federales. Quienes son los que no lograron tener equipo de seguridad que les resguarde.
No así quienes compiten por la Presidencia de la República, ellos tienen resguardo militar y de la Guardia Nacional, ahí nada ocurre irregular, todo lo que se va es permitido. El equipo de vigilancia se hace cargo de logística y hasta de revisión en listas de asistentes, es decir hay niveles de candidaturas.
Pero la imprudencia se presenta quienes descuidan su seguridad que es infiltrada con resultados negativos. Y hasta el candidato de MOPRENA al gobierno de Chiapas que se dio el lujo en pasear y posar para la foto en un auto deportivo de la marcha Jaguar, o el Lamborghini en el que fue vista haciendo campaña una candidata de MORENA, Guadalupe Martínez del municipio de Quecholac en Puebla.
Así lo violento de este proceso electoral, que esperemos no cobre más víctimas mortales a 28 días de la elección.
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