Miscelánea, salud y política   Judith Álamo López

A pesar de que el gobierno federal trata de minimizar la violencia y maquilló cifras al reconocer sólo 22 candidatos asesinados de los 33 que han registrado varias organizaciones independientes durante el actual proceso electoral, la violencia extrema, sin precedente, inevitablemente impactará los resultados de los comicios del 2 de junio.

Sin embargo, el presidente Andrés Manuel López Obrador, en su realidad alterna –ficciosa y facciosa–, en el último día antes de la veda electoral lanza otra de sus absurdas declaraciones:  “Quiero terminar el Gobierno sin un solo acto de represión, sin una masacre, sin desaparecidos, con paz, con tranquilidad, pero al mismo tiempo sin autoritarismo”. Esto ya no será posible, qué alguien lo despierte.

Aunque todos los mexicanos de buena fe deseamos una jornada electoral en paz, lo cierto es que este gobierno no logró pacificar al país, algunos dirían: ni lo intentó. Mantuvo una estrategia fallida de seguridad, que incluyó ofertas a las organizaciones criminales –según reciente informe de International Crisis Group– para reducir la violencia abierta a cambio de mayores libertades en su control territorial.

El control criminal sobre el territorio nacional ha crecido durante el gobierno de AMLO, la coalición Fuerza y Corazón por México (PRI, PAN, PRD) presentó ante las autoridades gubernamentales del país, incluidos INE, FGR y SEDENA, un mapa de riesgo electoral.

El documento sostiene que el 29% de secciones electorales están en riesgo de coerción o intimidación. Esto representa más de 20 mil secciones, de un total de 70,753 existentes. Hacemos votos porque se haya establecido un operativo que prevenga riesgos mayores.

Antes de la veda, los morenistas gritan en forma orquestada: “Agarren al ladrón” y denuncian a la oposición del PRIAN de estar desesperada y comprar votos, afirman: “pagan hasta dos, tres mil pesos…” “ofrecen a cambio tarjetas de la mujer…” 

Omiten que son ellos quienes desde posiciones de gobierno pretendiendo comprar la voluntad de la gente con el presupuesto público, ofrecen como propios los programas sociales que datan de tiempo atrás, y fueron elevados a rango constitucional con el apoyo de la oposición senatorial (PAN, PRI,PRD). Pero eso no lo aceptan, es tiempo de mentiras.

A pesar del alrededor de veinte puntos de ventaja en promedio que dan varias de las encuestadoras a la candidata oficialista Claudia Sheinbaum respecto a la opositora Xóchitl Gálvez, AMLO, el jefe ilegítimo de campaña de la transformación a perpetuidad, hasta hoy, a cuatro días de las elecciones del 2 de junio, violentando la ley que se lo prohíbe, presumió logros en combate a la pobreza.

¿Será que AMLO ve el peligro de que tres encuestadoras le den el triunfo a Xóchitl Gálvez? Massive Caller, le da un punto de ventaja con 44.3% de intención de voto con respecto a los 43.4 que obtendría Claudia Sheibaum; Trading le da 44.9% a la opositora y  42.9% a la oficialista; mientras que  AAGA Marketing otorga 36.62% a Gálvez y 33.51% a Sheinbaum. En tercer lugar, está Jorge Álvarez Máynez con 11.5; 7.6 y el 19.09%, de votación, respectivamente.

Por si las dudas, el mandatario sigue haciendo propaganda a favor de la candidata oficialista, con la connivencia del INE, que no quiso suspender la mañanera, a cambio lo ha apercibido más de 30 veces, lo que sólo ha sido motivo de burla por parte del presidente a quien nadie detiene.

Qué lejano el tiempo en el que el entonces candidato presidencial de tres distintos periodos electorales peleaba por la equidad para los opositores, inclusive participó en la reforma al artículo 134 constitucional para que se asentara que ningún funcionario público hiciera pronunciamientos o uso de bienes y medios a su alcance para favorecer a algún contendiente.

Sin duda, la primera gran trasformación de López Obrador ocurrió cuando logró coronar su ambición personal –como bien dijo Claudia Sheinbaum– de ocupar la silla presidencial, y al asentarse “humildemente” en Palacio Nacional se igualó a otro prócer -al menos en su imaginario-, su admirado expresidente Benito Juárez,  ahí se dio la segunda gran transformación, había que crear una confrontación entre buenos, los aliados liberales y los malos, opositores conservadores, “conservas” o sea los enemigos.

La tercera fue cuando día a día, en el principal escenario de su política pública, La Mañanera, en lugar de actuar como demócrata se convirtió en autócrata y quiso desaparecer todo contrapeso, se alió con los militares y pactó con criminales –bueno, esto ya venía de años atrás–se dice que el Cartel de Sinaloa le hizo aportaciones para su primera campaña, así lo consignan periodistas nacionales y de medios estadunidenses que ponen como prueba a testigos protegidos.

Esta semana un ejército de servidores de la Nación, empleados públicos a costo del erario, portando chalecos guinda –color oficial de Morena–, trabajaron hasta los días de asueto, como si les hubieran ofrecido bono de productividad, cargados de propaganda.

Visitaron plazas públicas parques, mercados, calles y camellones para advertirles a los beneficiarios de Bienestar que si no votaban por Morena se acabarían los apoyos sociales. También ofrecían despensas, becas y otras dádivas a cambio del voto ciudadano.

Las instituciones amodorradas, a causa del embate del jefe de jefes en su contra cada vez que actúan por su cuenta, hoy en forma inédita, la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) desmintió que Clara Brugada, la candidata de la coalición morenista a la jefatura de gobierno en la capital, tenga inversiones en algún paraíso fiscal.

Aunque, en la ciudad de México, de acuerdo a la mayoría de las principales encuestadoras, Santiago Taboada, de la coalición opositora es el favorito, no deja de sorprender la rapidez de ese órgano gubernamental aclaró la acusación hecha por el empresario veracruzano, Arturo Castagné, quien también ha presentado denuncias de enriquecimiento ilícito contra Rocío Nahle, la morenista zacatecana candidata a gobernadora de Veracruz, quien no ha recibido esa defensa oficial.

Para quien crea que la violencia es un invento, sólo ayer, en 24 horas, se registraron 83 asesinatos en todo el país, y hay varios centenares de sitios en territorio nacional donde anoche, ante un Estado ausente, no durmieron y su vida está en riesgo, varios miles de habitantes asediados por el crimen organizado, difícilmente podrán ejercer su derecho ciudadano al voto.

Los invito a ponernos en los zapatos de los habitantes de esos municipios bajo asedio criminal, como Pantelhó, Chiapas, una de las víctimas de hostigamiento criminal dijo esta mañana a una conductora de radio, vía telefónica, con voz suave, entrecortada: “sí queremos votar, pero en libertad”.

Quienes aún podemos ejercer el voto en paz y tranquilidad, con libertad debemos acudir a las urnas. Nadie con responsabilidad ciudadana quiere perder su derecho a decidir quiénes serán sus gobernantes a nivel presidencial y local, sus legisladores federales y locales, alcaldes y en nueve entidades se eligen síndicos, cabildos, regidores. Son más de 20 mil puestos puestos en disputa.

Si a pesar de los retrocesos en seguridad, salud, educación, medio ambiente, etcétera, crees que lo mejor es darle continuidad al gobierno de AMLO para que elimine las representaciones legislativas de las minorías, se elijan popularmente los funcionarios del Poder judicial, siga la política petrolera, entre otras propuestas de AMLO, vota este 2 de junio por Claudia Sheinbaum, y los candidatos de Morena, PT o PVEM.

Pero si crees que México necesita un cambio, un gobierno de coalición que retome el camino del crecimiento para México, que combata la inseguridad, mejore los servicios de salud y educativos, fortalezca organismos autónomos como el INE, mantenga la democracia plural, entre otras políticas energéticas y medioambientales contra el calentamiento global, vota por Xóchitl Gálvez, candidata ciudadana, y por alguno de los partidos que la postulan PAN, PRI o PRD.

La tercera opción en la elección presidencial es Jorge Álvarez Máynez, de MC, que ofrece impulsar un gobierno de jóvenes, con novedosas políticas públicas propuestas por Salomón Chertorivski en la capital. Aunque hay indicios de que MC podría ser un partido esquirol que sólo viene a dividir a la oposición.

Un breviario preelectorero: las mentiras, el manejo de las emociones para confrontar, por ejemplo, a pobres contra ricos –sembrando división y resentimiento– son parte de un estilo populista, autoritario, un ejemplo de este tipo de gobierno fue el de Adolf Hitler, quien sostenía “Haz la mentira grande, hazla simple, sigue diciéndola, y eventualmente, creerán”.

El tirano usó las formas ocultas de la propaganda para controlar al pueblo alemán y hacerlo cometer un genocidio contra el pueblo judío, él decía: “Mediante la aplicación inteligente y constante de la propaganda, se puede hacer que la gente vea el paraíso como un infierno, y también al revés, que considere el tipo de vida más miserable como un paraíso”.

Hitler fue un populista que se convirtió en dictador, cuyas ambiciones por llegar a ser el gobernante más poderoso de Europa lo llevaron a iniciar una guerra (la Segunda Mundial) que dejó de 40 a 50 millones de muertos, según la Enciclopedia Británica.