Por Luis Repper Jaramillo Sombra de Palacio Hace seis años (un sexenio), semanas más semanas menos, escribí en este influyente espacio informativo mi Columna que cabeceé “Peña Nieto, solitario de Palacio”, en referencia a que, meses de concluir su gestión, sus “colaboradores” (gabinetes legal, ampliado, descentralizados, autónomos, etc.) lo habían dejado solo, por dos circunstancias: […]
Por Luis Repper Jaramillo
Sombra de Palacio
Hace seis años (un sexenio), semanas más semanas menos, escribí en este influyente espacio informativo mi Columna que cabeceé “Peña Nieto, solitario de Palacio”, en referencia a que, meses de concluir su gestión, sus “colaboradores” (gabinetes legal, ampliado, descentralizados, autónomos, etc.) lo habían dejado solo, por dos circunstancias: Primera, en el último año de periodo presidencial el mandatario deja de ser el eje central y político de la administración, para dar paso a la figura electorera del candidato.
Así le sucedió a Miguel de la Madrid, con Salinas de Gortari: a éste con Ernesto Zedillo, a Neto con la imponente figura y presencia de Vicente Fox, gracias a su franqueza y frase lapidaria -que en verdad funcionó “sacaremos a patadas al PRI de Los Pinos”.
Felipe Calderón lo hizo con Fox. En el caso del PRI, no fue José Antonio Meade quien opacó a su correligionario Peña, sino el aspiracionista de la Coalición “Juntos haremos historia” (Morena, PT, PVEM), Andrés Manuel López Obrador, quien capitalizó la corrupción, ineptitud, tibieza del mexiquense para catapultarse a Palacio Nacional, a través de 30 millones 104 mil votos de la chairisa.
Segunda, año y medio antes, junio 2011, el sexenio de Peña Nieto estaba derrotado. Sus colaboradores intuyeron que las raterías, transas, fraudes, engaños del “adonis” atlacomulquense influirían en la derrota presidencial de 2018, por tantas equivocaciones, errores, simulaciones, como la “Casa Blanca” de las Lomas, la incapacidad de resolver los asesinatos de los 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa, o la estúpida frase de Jesús Murillo Karam, Procurador General de la República, por el mismo caso “ya estoy cansado” de esta investigación.
Ante tanta inestabilidad y corruptelas del sexenio 12/18, que “a rio revuelto, ganancia de pescadores”, varios funcionarios públicos hicieron rapiña con los presupuestos de sus carteras, su poder, etc. “comprándose” con dinero público (presupuestos) casas en México, en el extranjero, terrenos, cuentas bancarias en Suiza, foráneas y paraísos fiscales. Enriquecieron a familiares prestanombres, como el caso de Emilio Lozoya Austin (ex director de Pemex).
Situación que el eterno candidato presidencial (Peje) aprovechó para cimentar su mentirosa, embaucadora, falsa, timadora campaña electorera 2018 con 2 banderas que le permitieron comprar votos, conciencias, larvismo: “primero los pobres”, “acabaré con la corrupción”.
“Meteré, ofreció, a la cárcel a todos los funcionarios corruptos del sexenio pasado empezando por Enrique Peña Nieto”, su primer círculo político: Luis Videgaray, Miguel Ángel Osorio Chong, Jesús Murillo Karam, Salvador Cienfuegos, Luis Miranda Nava, Rosario Robles Berlanga, etc. que jamás cumplió, pero le funcionó para acceder al Poder.
Un extra, que salvó su pellejo Enrique Peña y se blindó López Obrador. El affaeir (negocio, asunto o caso ilícito) Peña/Peje En noviembre de 2012, en las catacumbas de Palacio Nacional, “negociaron”, “acordaron”, “bajo la mesa”, en lo oscurito, protegerse mutuamente para no ser exhibidos de sus corruptelas.
El Pacto de Palacio, lo llamé, pues sin la presencia de reporteros “de la fuente” o pool de casa (reporteros, funcionarios de Prensa de Presidencia, sin cámaras, fotógrafos, ni audios) los delincuentes se reunieron en 2 ocasiones -antes de entregar y recibir la Banda Presidencial- en ultrasecreto. No se emitió comunicado de prensa alguno. Reunión en donde negociaron “no agresión”, “no balconeo” “ni sacar trapitos al Sol”, de lo que hizo Peña durante 6 años y de lo que sabe -aun- Enrique del negro, perverso y transa pasado del Peje.
Ya para entonces, el mexiquense era un fantasma rondando Palacio Nacional, Los Pinos, y la Presidencia de la República.
Hoy, insisto, 6 años después, se repite la historia. Andrés Manuel es Solitario de Palacio
En primera instancia, porque lo decidió desde el periplo electorero de 2018 y a partir del 1 de diciembre del mismo año (inicio del sexenio de la T4a) cuando se apoderó y empoderó de la Presidencia de México, al autodesignarse “el poder soy yo”, “por encima de una Ley está la autoridad moral y política. Yo represento a un país y a un pueblo, porque tengo autoridad moral” ¡¡Zas, así de loco, así de esquizofrénico!!
A lo largo del fallido sexenio, lo dicen dentro y fuera del país, en México se ejerce el gobierno de un solo hombre (dictador), quien ordena, dispone, quita, pone, corre, regala dinero, envía iniciativas de ley al Congreso, con mayoría oficialista, con la amenazante leyenda “no se cambie ni una coma”.
En un decretazo (recurso legal prostituido por López Obrador) dispuso que los dineros del país (recursos públicos por impuestos, multas, recargos, prestación de servicios oficiales, decomisos, etc.) será quien disponga a discreción su uso, asignación, gasto, usurpación, destinos. Esto es, no toma en cuenta opinión, sugerencia, ordenamiento legal de la SHCP, de la Cámara de Diputados, del Banco de México, de ninguna institución financiera oficial. Se auto permitió “libre albedrío” para disponer, a su antojo, la riqueza de la Nación, porque tiene -como dice- autoridad moral y política pues representa a un pueblo, a un país. Ja ja ja.
Te equivocas, Peje, en una nación democrática como México, un tipejo de tu calaña no puede ejercer funciones de gobierno, juez, parte, depredador de los dineros públicos. Administrar -porque eso haces -pues no sabes gobernar, ni idea tienes cómo se come eso- y lo haces mal.
Eres el eterno (perdedor) candidato presidencial y la muestra está en que has destrozado, jodido, hundido al país, por tus decisiones unipersonales. ¿Sabes, loco? a ti las instituciones, la población, el Estado de Derecho, el Pacto Federal, la Constitución te han estorbado para imponer tu perversa ambición de dictador. Pero eso se acabará el 2 de junio, en y desde la urna electoral.
A estas alturas del partido (sexenio), como dice el clásico, estás solo, abandonado, arrinconado como la muñeca fea. No dudo, porque eres astuto, que aún tienes el control de tus larvas, a quienes manipulas como te place, pero la realidad es que tu poder (por tantas pendejadas cometidas) sucumbe. Quieres demostrar lo contrario, mangoneando a tu lagartija pestilente, Claudia Sheinbaum, candidata presidencial de Morena. No la has dejado crecer; está hundida, perdida, por la presencia, calidad moral, política, propuestas y capacidad de Xóchitl Gálvez. La tienes atada con camisa de fuerza. Lo haces, no por estrategia, sino por soberbia, arrogancia, vanidad de que no rebase tu narcisismo. Eres misógino, patán. Sólo importas tú, el mesías, el envido del Cielo, que alguna vez dijiste.
Estás abandonado por tus corifeos, Palacio Nacional, no te queda grande, sino enorme. Te ves como una hormiga hambrienta en un pastel de bodas de 5 pisos.
¡Vamos!, hasta tu pareja Beatriz Gutiérrez Müller abandonó “el nido” porque no soporta tu presencia, arrogancia, enanez. Sólo conviven contigo -en un palacio que no mereces- tu cuerpo médico especializado, llegado de Cuba, para cuidar o al menos paliar tu deteriorada salud. Te habilitaron una sala quirúrgica para atender tus constantes desvanecimientos, quebrantos y vagidos.
¿Sabes, Andrés? Tu multimillonario hospitalito al interior del Palacio Virreinal, para atenderte sólo a ti, me lleva a recordar aquel vuelo de Mexicana de Aviación militarizada, AIFA – Acapulco, con un solo pasajero (porque no hubo más demanda), esto se convierte en signo de tu estatus como hombre y como burócrata, la soledad.
Estas solo Peje, se han alejado de tu alcance los aspiracionistas de Morena a un cargo de elección popular. Robaron lo suficiente durante 5 años y meses para “pagarse” sus campañas, sin esperar que los patrocines… bueno, ya lo hiciste, pusiste todo el poder del Estado y los dineros públicos para lograr votos. En tu caso te interesan dos posiciones, la presidencial y la legislativa, obviamente sabemos por qué.
Mira, López, los primeros en abandonarte, dejarte solo en tu castillo de naipes fueron tus 3 holgazanes, ratas, corruptos, malandrines, víboras hijos, José Ramón, Andrés Manuel, Gonzalo Alfonso López Beltrán, quienes te exprimieron, saquearon, aprovecharon tu posición y parentesco para atracar con nepotismo. Resultaron tan astutos y calculadores como tú. Aplicaron la máxima política “no me des, sólo ponme en donde hay, que de los demás me encargo yo” Es decir, José Ramón, Andrés Manuel (Andy), Gonzalo Alfonso (Bobby), no necesitaron cargo alguno, diplomático o de representación internacional para volverse millonarios (llegaron a Palacio siendo mendigos, buenos para nada, ninis, mantenidos, desempleados… y por arte de magia, hoy son “próspero empresarios”)
Los hijos buenos, dignos, honestos (no como los tuyos), no traicionan, felonian, humillan, denigran al presidente de un país. Debieron ser ejemplo de honradez, respeto, probidad, dignidad que respaldarían el honorable trabajo (presidente de la república) que lideraría a más de 130 millones de mexicanos.
No les importaste, Andrés. Su corrupción, raterías, desprestigio, impunidad dieron muestra de abandono, que terminaras tu sexenio en la ignominia, soledad, indignación popular, perversidad, traición a la Patria. Te dejaron solo, como lo harán más adelante, Mario, Citlalli, Claudia, Luisa María, Delfina (fina para la transa), Esquer, Cuitláhuac, Cuauhtémoc, Alfonso, Adán, Marcelo, Gertz, Octavio, Manuel, Luis Crescencio, Martí y muchos etcéteras.
Solitario de Palacio eres Andrés. Tú que arrasaste masas, llenaste plazas, primeras planas, encuestas, votos (30 millones 104 mil), que acumulaste adoradores, aduladores, chairos, pejezombies, amlovers, “pagados”, acarreados, etc. Hoy, eres nadie: una sombra en Palacio
Los comentarios están cerrados