“Siempre es Buen Momento para Apoyar al Pueblo” Durante su gira por el Estado de México, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo defendió la propuesta de reducir la jornada laboral en México de 48 a 40 horas semanales, ante críticas de algunos sectores empresariales, como la Coparmex, que han cuestionado el momento para aplicar esta medida. […]
Publicado por Redacción MH
“Siempre es Buen Momento para Apoyar al Pueblo”
Durante su gira por el Estado de México, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo defendió la propuesta de reducir la jornada laboral en México de 48 a 40 horas semanales, ante críticas de algunos sectores empresariales, como la Coparmex, que han cuestionado el momento para aplicar esta medida.
Desde la Plaza Gustavo Baz de Tlalnepantla, la mandataria federal respondió con firmeza:
“Siempre es buen momento para apoyar al pueblo, lo que pasa es que nunca querían apoyar al pueblo de México”.
Propuesta de la semana laboral de 40 horas
Sheinbaum recordó que el 1º de mayo, Día Internacional del Trabajo, anunció el inicio del proceso para la discusión formal sobre la semana laboral de 40 horas. Esto, en línea con la agenda de derechos laborales impulsada por el gobierno de la Cuarta Transformación (4T).
“Antes decían: ‘qué mal momento para apoyar al pueblo’. No, el mal momento era cuando se tomaban decisiones sin pensar en el bienestar de las y los trabajadores”, afirmó.
Economía moral y salario mínimo
En su mensaje, Sheinbaum contrastó la actual política económica con la de gobiernos anteriores, señalando que el nuevo modelo de “economía moral” ha demostrado que mejorar las condiciones laborales no frena la inversión.
Destacó que el salario mínimo ha aumentado más del doble durante los últimos años, sin provocar inflación, y coincidió con un récord histórico en inversión extranjera directa en México.
“Querían que el pueblo siguiera ganando poco. Pero hoy el pueblo vive una transformación real, con justicia social y dignidad laboral”, señaló la presidenta.
Justicia para víctimas, una prioridad
El evento fue brevemente interrumpido cuando un hombre alzó una pancarta para pedir justicia por el asesinato de su hija y su nieto. Sheinbaum descendió del podio y habló con él directamente durante algunos minutos.
La acción fue recibida con respeto por los asistentes. El hombre agradeció entre lágrimas la atención personal de la presidenta, quien luego retomó su discurso con el compromiso de seguir escuchando y atendiendo al pueblo mexicano.
