De Política Alejandro Álvarez Manilla

Violencia, sequía y enfrentamiento político por ambición de poder y de manipulación, es la crisis que vive actualmente México, que impacta de alguna manera a la ciudadanía.

En los estados como Chiapas, Guerrero, Guanajuato y Michoacán los conflictos bélicos son diarios, cuando no ocurre en zonas rurales, los son en zonas urbanas. El caso del puerto de Acapulco, Guerrero, con la presión de la delincuencia organizada para que prestadores de servicios les den cuota de protección, lo cual ha generado para de actividades del transporte público que ha sido suplido por las fuerzas armadas.

Los secuestros en Chilpancingo la capital del estado, y los enfrentamientos entre grupos delictivos, ocurren diariamente sin que haya autoridad que proteja a la población.

En Chiapas, estado fronterizo caracterizado por ser otra entidad conflictiva, la violencia no le da tregua, con la migración que llega de Centro América, que generó que los grupos delictivos se dediquen a secuestrar y extorsionar a migrantes, aunado a los cobros de piso y de dominio, tienen al estado incendiado, y al igual que en Guerrero, no hay gobierno estatal, municipal o federal que brinde seguridad a los pobladores o paseantes.

Guanajuato, estado prospero en el ramo industrial es asechado por la delincuencia, que al encontrar áreas productivas fincan sus acciones contra empresarios, comerciantes y empleados, sin que hasta ahora se logre frenar ese ataque delincuencial por parte de las autoridades.

Mientras en Michoacán, ahí no pasa nada, No hay extorsión a productores agrícolas Aguacateros o Limoneros, no hay zonas de conflicto y enfrentamientos, El gobernador solo atiende los llamados presidenciales para acudir a Palacio Nacional, pero no para aplicar políticas públicas y menos de prevención y seguridad para la población.

Esta Crisis de credibilidad por inoperancia de gobiernos, afectará a la inversión a largo plazo, en entidades productivas importantes.

Hoy vivimos también la crisis de los Partidos Políticos, quienes, en la búsqueda del poder en el gobierno, generan la crisis política, por las peleas que hay entre grupos por una parte y en la contraparte por hordas y clanes que en ambos casos exigen negociaciones con posiciones y hasta derechos de decisión. En tanto esa crisis se vive, se olvida la crisis futura que daña al país en general, la escasez del agua, pues mientras los grupos delictivos y políticos pelean, no buscan solución al conflicto hídrico en puerta, no analizan construcción de presas, perforar nuevos pozos de extracción, rencauce de ríos, áreas de captación de agua de lluvia pluvial en zonas urbanas, y menos una forma de educación y fomento de cuidado en torno a este líquido, que es, de seguridad nacional, ya que sin agua en México, habrá problemas y muy graves, al no ver el futuro del país, sino solo el pasado y el presente, que hoy tiene a nuestro querido México en Crisis