Por Luis Repper Jaramillo Misógino Está y están desesperados. Han agotado los recursos legales, constitucionales, tramposos, perversos, simulados, y no pueden ni podrán repetir en 2024 en buena lid, la prolongación de la Transformación de 4ª, en la presidencia de México, por corruptos, transas, burros, imbéciles, impreparados, inútiles, traidores, rateros, etc. Andrés Manuel, T4a, y […]
Por Luis Repper Jaramillo
Misógino
Está y están desesperados. Han agotado los recursos legales, constitucionales, tramposos, perversos, simulados, y no pueden ni podrán repetir en 2024 en buena lid, la prolongación de la Transformación de 4ª, en la presidencia de México, por corruptos, transas, burros, imbéciles, impreparados, inútiles, traidores, rateros, etc.
Andrés Manuel, T4a, y lo que nunca ha sido un partido político, sino una empresa familiar de los López Obrador y López Beltrán SA de CV (Morena), no saben qué hacer digna y moralmente, para convencer al pueblo bueno y sabio, de que alargar 6 años más la dictadura del Peje, porque es inadmisible, antidemocrático, irracional, insensato, bestial, pues durante 5 años de (des) gobierno, la T4a ha provocado estancamiento, retroceso, inanición de México, que ni en los peores años de la era moderna (PRI: Días Ordaz, Luis Echeverría, López Portillo, Salinas, Peña Nieto. PAN, Calderón) habíamos estado tan jodidos, perdidos, ignorados, catatónicos, por un “movimiento” politiquero que no sabe, ni sabrá gobernar un país digno, gigante, solidario, unido, noble, porque no estaban, ni están preparados para gobernar. López Obrador llegó a Palacio Nacional a cobrar venganza contra los mexicanos y a robar lo que más pueda; no sólo él, sino su maldita raza, primer círculo, amigos, “compromisos” y “facturas”.
Un día sí, y tantos meses también, el merodeador de PN comete torpezas, locuras, improvisaciones, idioteces, como sistema, no recurso, porque su incultura, improvisación, inoperancia, incapacidad, carencia de perfil profesional para el cargo, lo lleva a sus ruindades (pendejadas) sin tener reacción o plan para corregir lo que durante un quinquenio ha desgraciado a la Nación.
Andrés Manuel es un bagatelo, jamás supo guiar o planear a nuestro México para el futuro. No tiene visión –más allá de su nariz- Para él sólo existe el hoy, yo, “lo que diga mi dedito”, “yo tengo otros datos”, “no somos iguales a los neoliberales”, “quien no está con la T4a, está contra México”, han sido sus idiotismos para tratar de convencernos que son la única opción para seguir gobernando, pese a los infames resultados de su gestión.
A lo largo de su desastrosa vida política (PRI, PRD, Morena) sumida en escándalos, transas, contubernios, extorciones, componendas, traiciones (al PRI, PRD, Chairos, amlovers, pueblo bueno y sabio, a la Constitución y sus leyes, a varios cercanos como Marcelo Ebrard, etc.) raterías, perversiones, el Peje se acostumbró a sobornar para obtener ganancias, dinero –desde luego-. Sólo dos casos de ello: en 1992, el Peje mantenía un plantón de trabajadores de limpia de Tabasco, en el Zócalo del DF. Se acercaban las celebraciones de independencia: el Grito y el Desfile Militar. Andrés se resistía a dejar la Plaza Mayor del País. El entonces Regente del DF (PRI) Manuel Camacho Solís, transó con el tabasqueño desalojar.
En lo oscurito, Manuel Camacho y López Obrador lograron un jugoso acuerdo. El reaccionario recibió del Gobierno del DF (dinero público, de los capitalinos) 9 mil millones de pesos (de aquel entonces, cuando nuestra moneda aún tenía 000 ceros). La asignación de 200 autobuses para regresar a los paristas a Villahermosa. Varias patrullas y ambulancias que escoltaron a la caravana, sin pagar peaje de las autopistas; viandas, refrescos, “suvenires” de la Ciudad.
Lopitos se quedó con el 70% de la riqueza extorsionada, el resto (30 por ciento) se repartió entre los borregos que secundaron al usurpador.
En 2006, cuando Felipe Calderón (PAN) derrotó en las urnas a López Obrador, este cínico, eterno perdedor, no toleró el triunfo azul. Acto seguido tomó, bloqueó (instaló un campamento) en el Paseo de la Reforma, desde periférico –Fuente de Petróleos- hasta el Zócalo del DF, por más de 45 días, en protesta, acusó, por el fraude electoral. Esta manifestación insensata, provocó el cierre definitivo de decenas de negocios, despido de personal, pérdidas millonarias a terceros. Inseguridad, insalubridad, violaciones a mujeres, raterías, asaltos, etc. con la anuencia, contubernio, complicidad de López Obrador, pues jamás hizo guardia en las mazmorras instaladas, pues dormía, se alimentaba y bañaba en la comodidad de un gran hotel cercano al cochinero, pagado por el Gobierno del DF, bajo la regencia perredista de Alejandro Encinas.
Fue una desgracia social y económica el bloqueo de Reforma (así se le conoció)
Como en el caso del Zócalo en 1992, Andrés Manuel “negoció” con Encinas Rodríguez “levantar” la insensatez, sin embargo, esta vez no trascendió el “moche” que tuvieron que pagar los capitalinos para permitir que los zánganos que por más de 45 días pasaron inútilmente ese tiempo se fueran. No fue menor a lo obtenido al inicio de la década de los 90’s. Aah, otra idiotez del peje, ese año se autonombró “presidente legítimo”, formó su gabinete alterno –con unos desadaptados, seguidores de este enfermo metal- que no trascendió más que en su mundo ideal.
Pero volvamos a nuestro tiempo. A través de su mamotreto Transformación de 4ª y el fracaso de su (des) gobierno, pese a haber llegado a Palacio Nacional con un hito histórico democrático del país (30 millones 104 mil votos legítimos, legales), su incapacidad, soberbia, inutilidad, corrupción, impunidad y nepotismo, López Obrador jamás ha sabido o ejercido (digna, moral y éticamente) el cargo de Jefe del Ejecutivo, sino se ha dedicado a lo que domina a la perfección: eterno candidato presidencial, cuya experiencia de casi 24 años (dos intentos perdidos y uno atinado) ha descuidado la labor presidencial, a cambio de impulsar candidaturas como la de Claudia Sheinbaum, quien durante 5 años ha maquinado cómo llegar a Palacio Nacional, impulsada por el poder del Estado desde la “casa del pueblo” (hoy amurallada, por el miedo al pueblo bueno y sabio)
Como no puede por las buenas –convencer al colectivo popular- de prolongar su gobierno, al menos 6 años más, con argucias, corrupción, cobardía, irracionalidad, impulsa por las malas denostar a los órganos (que nos dan patria y ciudadanía), SCJN, Consejo de la Judicatura Federal y Tribunal Electoral Federal para que sucumban a su inmoralidad, desaparecerlos, para allanarse el camino hacia la Dictadura Perfeccionada (que al PRI le costó 70 años, lo dijo Mario Vargas Llosa) pero el Loco de Palacio pretende realizarlo en 6.
Desde el 1 de diciembre de 2018, maquinó junto con Morena, deshacerse –como fuera- de los otros 2 Poderes de la Unión. Al ganar PN, obtuvo mayoría absoluta en el Congreso de la Unión (diputados y senadores), por lo que controla 2 Poderes: Ejecutivo y Legislativo.
Sin embargo no ha podido con el Judicial, pese a que en la presidencia de Arturo Zaldívar, se confabularon para alargar 2 años más (ilegalmente) la titularidad en la Corte y la Judicatura, con lo que el gusano de Zaldívar, “trabajaría” para modificar la Constitución y pretender impulsar la reelección de López.
Por fortuna la intentona fracasó, porque hay Ministros dignos, demócratas, institucionales, que echaron para abajo la perversa idea “legaloide”
Casualmente en ese entonces habría cambio en la presidencia del Poder Judicial (Corte, Judicatura, Tribunal Electoral). El Peje pretendió imponer como aspirante a la hoy Ministra Pirata (se fusiló sus tesis de licenciatura y doctorado), Yazmin Esquivel Mossa, comadre del tabasqueño. Su falsedad y corrupción la eliminó del proceso, 9 de los 11 Togados se inclinaron por la Ministra Norma Piña Hernández, a quien López Obrador odia, detesta, inquina. Porque es más inteligente, transparente, profesional, incorruptible. Posee títulos de licenciatura y doctorado en su especialidad: psicología social y comunicación (Universidad de Madrid, España), Derecho Constitucional y Administrativo. Especialidad Judicial; Derecho Penal, Diplomado en Derecho Constitucional y Amparo. Argumentación Jurídica.
En tanto su detractor, penosamente pudo conseguir (14 años después) su título de licenciatura en Ciencias Políticas y Administración Pública, por la UNAM, con un miserable promedio de 7.8, no sin antes presentar 14 exámenes extraordinarios (por burro). Además de su envidia académica, López guarda rencor a Piña Hernández, por ser mujer, un rasgo personal del tipejo misógino.
Desde el preciso momento en que la Ministra Piña asumió el Poder Judicial, López le declaró una guerra, una campaña sucia, de odio, denostación, de agresión física, mediática, virtual, misógina, cobarde. Todo el poder del Estado contra la Ministra, la Corte, Judicatura, utilizando a sus chairos, botts, “floreros” de gabinetes, golpeadores para intimidar a la dama. Sin embargo, esto fortaleció la imagen, poder, simpatías, empoderamiento, protección y respaldo a la abogada.
El inculto Peje ordenó a todo lo que hiede a Morena, PT y Verde Ecologista boicotear, injuriar, vilipendiar a la Señora Piña, al grado de no pueden por la vía legal. Andrés Manuel tuvo la cobardía (es su personalidad) de violar lo sagrado de un trabajador: su salario. Dispuso una iniciativa legaloide para reducir el presupuesto 2024 al Poder Judicial; además, robar (desaparecer. Aprobado por los diputados oficialistas) 15 mil 450 millones de pesos, de 13 de 14 fideicomisos que por más de 50 años ha detentado y administrado la Corte, Judicatura y Tribunal Electoral, en favor de 55 mil empleados del sector.
Su inquina, contra una dama, inflige la calidad de vida de los trabajadores, la protección de sus familias, atenta contra la dignidad del hogar, etc. por una brutal, perversa, miserable, cobarde venganza, pues López no acepta contrapesos, éxito de sus contrincantes (Piña no lo es). Sólo asume su rol de proteger al Poder Judicial, la impartición de justicia, la tranquilidad –haciendo respetar el Estado de Derecho- de la población y las instituciones.
López con esa amargura que rae su interior –literalmente- pretende robar ese dinero del presupuesto y fideicomisos. Sólo falta que el Senado apruebe, enmiende, corrija la iniciativa de modificar la Ley Orgánica del Poder Judicial, para consumar esa marranada.
Piña Hernández buscó en la Cámara Alta entablar un dialogo con los Coordinadores Parlamentarios, PAN, PRI, PRD, MC aceptaron el encuentro. Morena, PT y Verde Ecologista, rechazaron el ofrecimiento. La sinrazón, antidemocracia, sumisión a López, triunfaron sobre el diálogo, los acuerdos, la democracia, lo ético y moral.
El miedo a lo legal fue, es y será el ADN de López Obrador, sus larvas y su vida.
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