De Política Alejandro Álvarez Manilla El amor es un complemento en la vida de todo ser humano. Forma parte del desarrollo de cada persona, lo cual permite una integración social e incluso la formación de familia. Pero con la transición del gobierno presidencial ahora con el Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), los enlaces amorosos que […]
De Política Alejandro Álvarez Manilla
El amor es un complemento en la vida de todo ser humano. Forma parte del desarrollo de cada persona, lo cual permite una integración social e incluso la formación de familia.
Pero con la transición del gobierno presidencial ahora con el Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), los enlaces amorosos que terminan en bodas entre conocidos políticos o funcionarios han sido de escándalo.
Hace poco más de seis años, en septiembre de 2018, en la ciudad de Puebla, César Yáñez Centeno, en ese entonces quien llevaba la comunicación por varios años de Andrés Manuel López Obrador, se casó con la empresaria de Tlaxcala, Dulce María Silvia, evento al que acudió el propio presidente electo, y que fue publicitado hasta en la revista Hola.
Esta boda fue severamente criticada por la opulencia como se realizó, de un futuro funcionario que estaba inmerso en el gobierno que buscaba imponer la austeridad.
Resultado, César Yáñez fue relegado de su cargo de comunicación a una oficina de presidencia.
En noviembre de 2021, se realizó otra boda que afectó carreras políticas importantes fue la de Santiago Nieto, en ese entonces titular de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), con la consejera electoral Carla Humphrey, en una boda con sus familiares y amigos más cercanos, realizada en Antigua, Guatemala.
La suerte influyó, a un directivo de un importante periódico nacional le decomisaron más de cien mil dólares, y fue detenido por autoridades guatemaltecas, mientras se aclaraba la portación de ese dinero sin declarar. Pero en el avión privado viajaba una funcionaria del Gobierno de la Ciudad de México, la entonces secretaria de Turismo de la capital, Paola Félix, que perdió su cargo y la boda de Nieto y Humphrey se volvió un escándalo. Santiago Nieto salió de la UIF y del círculo de MORENA los novios fueron duramente criticados.
Para seguir con una boda más de escándalo, esta ocurrió el 4 de octubre de 2024 en el Museo Nacional de Arte, donde se realizo un brindis por el enlace matrimonial de Martín Borrego Llorente, con el pretexto de un “acto diplomático” por el 89 aniversario de las relaciones diplomáticas entre México y Rumania, a la que asistieron 70 invitados, casi todos diplomáticos y de la más entera confianza de la pareja, incluida, la hoy secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales Alicia Bárcena.
Esta información se publico el domingo en El Universal en la Columna de Claudio Ochoa titulada “La (no) boda fifí en el MUNAL”.
Esto, dio paso a la crisis del amor en tiempos de la 4 T. Martín Borrego Llorente, reinicio al cargo de Coordinador de Contacto con la Ciudadanía, plaza 15633, nivel M42, de la Secretaria del Medio Ambiente y Recursos Naturales Semarnat, con el argumento que si bien el evento fue de carácter privado “acorde al protocolo establecido por el Museo y cubierto con recursos personales”, fue impropio “haber solicitado el espacio a través de un correo institucional” cuando se desempeñaba como su jefe de Oficina en la Secretaría de Relaciones Exteriores.
Pero ante lo incierto que es hacer público el amor en tiempos de la 4 T, ahora en su segundo piso, quien por lo menos oculto su boda este próximo 14 de diciembre, fue la gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado, con quien es su pareja hace ya varios años, Rubén Hernández Fuentes, y que es jefe de gabinete del actual gobierno guerrense.
Así que funcionarios de la 4 T a cuidar el amor en estos tiempos.
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