El Tribunal Electoral declaró, por unanimidad, a Claudia Sheinbaum como presidenta electa de México para el periodo del 1 de octubre de 2024 al 30 de septiembre de 2030 tras validar la elección presidencial, con lo que se convertirá en la primer mujer en la Presidencia de la República. En la sesión de este 14 de agosto de 2024, […]
El Tribunal Electoral declaró, por unanimidad, a Claudia Sheinbaum como presidenta electa de México para el periodo del 1 de octubre de 2024 al 30 de septiembre de 2030 tras validar la elección presidencial, con lo que se convertirá en la primer mujer en la Presidencia de la República.
En la sesión de este 14 de agosto de 2024, los magistrados de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) determinaron que la elección presidencial del 2 de junio fue “ampliamente válida” por los resultados que obtuvo la candidata de Morena, Partido del Trabajo y del Partido Verde, con 35.9 millones de votos de acuerdo con el cómputo final, el cual aprobaron.

En su primer discurso ya como presidenta electa, Sheinbaum aseguró que actuará con honestidad y responsabilidad, además de que respetará la independencia de poderes e hizo el compromiso con el pueblo de México de no defraudar e incluso poner hasta su vida para servir al país y a todos los ciudadanos.
Claudia Sheinbaum aseguró que su llegada a la Presidencia no la asume como un triunfo personal, ya que no llega sola, “llegamos todas las mujeres. Las mujeres heroínas de nuestra patria, las visibles, pero también los millones de mujeres invisibles de generaciones y generaciones”.
“Llego nutrida y de la fuerza que provienen de nuestras ancestras, nuestras abuelas, nuestras madres, nuestras hijas y nietas, hoy llegamos todas y con ello me comprometo para seguir construyendo igualdad y libertad para todas las mujeres mexicanas y en especial de las más vulnerables”, mencionó.
Claudia Sheinbaum se comprometió con el pueblo de México a no defraudar en su próximo sexenio y aseguró que incluso pondría la vida misma para servir al país como la primera mujer en la Presidencia de la República.

“Actuaré con honestidad, responsabilidad, respetando la independencia de poderes, gobernaré para todos y tengan la certeza que nos sentimos y sentiremos todos cada día más orgullos de nuestro origen y porvenir. Nadie debe temer a nada, el futuro es promisorio, somos un país y un pueblo extraordinario, único, maravilloso. Estaremos a la altura de las circunstancias. Hago el compromiso de no defraudar y poder todo mi empeño, conocimiento, corazón, mi esfuerzo, voluntad y hasta la vida misma para servir a mi patria y a mi pueblo”, puntualizó al final de su discurso.
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